Exposición Misterios Grabados

Esther Tenedor realizó una exposición individual en la Delegación del Vallés Oriental del Colegio de Aparejadores y Arquitectos en Granollers.

Esta exposición tuvo lugar del 13 de Junio al 3 de Septiembre del 2005 y el nombre de la misma fue «Misteris gravats» Misterios Grabados.

Aquí os dejamos imágenes del folleto de la misma:

Y a continuación reproducimos el texto traducido de Hans Móller:

¿Por qué grabado y no seriado?

La pregunta sería buena para cualquier artista y situación. Se pueden pintar piezas más o menos idénticas o se puede hacer una tirada de grabados que también serán más o menos idénticos. La diferencia radica en la intención. Hacer piezas idénticas es, sobre todo, un ejercicio de estilo y a menudo también el vehículo que consolida una obsesión. Para hacer grabado, es decir, repetir una misma imagen por multiplicación de la prensa es un acto de divulgación y de popularización. El caso que nos ocupa acompaña la trayectoria de la pintora Esther Tenedor, que ocasionalmente hace grabados. Su dedicación profesional al estampado de tejidos es un buen laboratorio de experiencias que luego se podrán repetir -o evitar- en el estudio de pintura.

Precisamente, la pintura que hace Esther Tenedor tiene unos registros distintos de los que vemos en sus grabados, probablemente porque pertenecen a fases evolutivas diferentes. De una pintura convulsa, llena de arrebatos, arrancadas violentas y probaturas de materiales, Esther Tenedor se pasa al grabado con la suavidad de un alquimista que no quiere traspasar los límites de la prudencia doctrinal. Y estos grabados tienen algo de obra seriada: Esther Tenedor hace pocos ejemplares, porque lo que le interesa no es una producción específica, sino los resultados inmediatos, el efecto grabado, tan sorprendente y simétrico, y tan a menudo un regalo para el espíritu observador. Por ello, los tirajes limitados producen ejemplares diversos, de colores diferentes y concentraciones de luz también diferentes.

De hecho, más que una tirada de grabados, Esther Tenedor hace una edición limitada de múltiples, pero quizás esto sería entrar en observaciones que no provienen de su deseo. Su tarea con las planchas y los utensilios en la mano es desarrollar sus sentimientos directamente y tener que esperar a que el proceso de estampado le devuelva sus impulsos en forma limitada e inalterable.